1980
Bartolomé Crespi Capo funda Picados y Grabados. Sita en el núcleo urbano de Elda, junto al Mercado Central, con la intención de servir como taller auxiliar para fabricantes de calzado y bolsos.
Un simple vistazo al nombre escogido para bautizar al negocio basta para hacerse una idea de cuál era la dirección que quería tomar la empresa. Si bien, en un principio, ésta únicamente giraba en torno a la perforación y grabado de materiales, con el tiempo se fueron añadiendo otra clase de trabajos intentando ampliar el abanico de opciones disponibles. De forma paulatina Bordados, Pasados y artículos de Alta Frecuencia enriquecieron el catálogo, aumentando de este modo la oferta comercial, y con ello el volumen de los pedidos.